Calculadora de Gravedad de la Tartamudez (SSI-4)
Evalúe la gravedad de la tartamudez a través del SSI-4 (Stuttering Severity Instrument - versión 4).
Important Medical Disclaimer
This calculator is an educational and clinical decision support tool. Results DO NOT replace professional medical evaluation, laboratory tests, or clinical judgment. Always consult a qualified healthcare professional for diagnosis, treatment, and clinical decisions. Calculations are based on scientifically validated formulas but may not be applicable to all patients.
Evaluación SSI-4
Nota: El SSI-4 es una herramienta de evaluación. Un análisis completo por un fonoaudiólogo es esencial para el diagnóstico y tratamiento.
¿Qué es el SSI-4?
El SSI-4 (Stuttering Severity Instrument - 4ª edición) es un instrumento estandarizado para evaluar la gravedad de la tartamudez en niños y adultos. Desarrollado por Glyndon Riley, el SSI-4 evalúa tres dimensiones: 1) Frecuencia - número de disfluencias por 100 palabras, 2) Duración - tiempo promedio de los 3 bloqueos más largos, 3) Concomitantes físicos - tensión muscular y movimientos asociados (facial, cabeza, miembros). La puntuación total (0-46) clasifica la tartamudez en 5 niveles de gravedad. El SSI-4 es el instrumento más utilizado a nivel mundial para la evaluación de la tartamudez, con alta confiabilidad test-retest y validez. Se utiliza para el diagnóstico inicial, seguimiento terapéutico e investigación.
Sistema de Puntuación
Total Score: 0-46
- 0-10: Very Mild
- 11-21: Mild
- 22-30: Moderate
- 31-36: Severe
- 37-46: Very Severe
Preguntas Frecuentes
¿Qué causa la tartamudez?
La tartamudez es un trastorno multifactorial de la fluidez. Factores genéticos: 60-80% de los casos tienen antecedentes familiares. Estudios han identificado genes asociados (GNPTAB, GNPTG, NAGPA). Factores neurológicos: Diferencias en áreas cerebrales de procesamiento motor del habla (giro frontal inferior, ganglios basales). La neuroimagen muestra hiperactividad en el hemisferio derecho e hipoactividad en áreas motoras izquierdas. Factores del desarrollo: La tartamudez del desarrollo típica comienza entre los 2-5 años, coincidiendo con la explosión del lenguaje y la demanda motora compleja. El 75-80% de los niños se recuperan espontáneamente antes de los 7 años. Factores ambientales: La presión comunicativa, el ritmo rápido del habla de los padres, las críticas o las burlas pueden agravarla, pero NO causan la tartamudez.
¿Cuál es la diferencia entre tartamudez del desarrollo y neurogénica?
Tartamudez del desarrollo: Inicio en la infancia (2-5 años), evolución gradual, patrones típicos (repeticiones, prolongaciones, bloqueos), conciencia variable, frecuentemente presenta concomitantes físicos, responde bien a la terapia de fluidez. Tartamudez neurogénica: Inicio súbito después de una lesión cerebral (ACV, TCE, tumor, Parkinson), cualquier edad, patrones atípicos (disfluencias en palabras de función, sin adaptación), poca conciencia inicial, menos concomitantes, respuesta variable a la terapia tradicional. Tartamudez psicogénica: Rara, inicio súbito en adultos, relacionada con trauma psicológico, patrones extraños (mismas disfluencias en cada palabra), mejora en situaciones de distracción, puede desaparecer abruptamente.
¿Los niños pequeños deben iniciar terapia inmediatamente?
Depende de los factores de riesgo de persistencia. Esperar la 'recuperación espontánea': Si <6 meses de inicio, sin antecedentes familiares, el niño no está preocupado, disfluencias leves (repeticiones de sílabas/palabras sin tensión). Monitorear cada 3 meses. Intervención temprana indicada: Si >6-12 meses de tartamudez, antecedentes familiares fuertes (especialmente sexo femenino), el niño presenta frustración/evitación, disfluencias severas (bloqueos, prolongaciones con tensión), concomitantes físicos evidentes, sexo masculino (riesgo 3-4 veces mayor de persistencia). Enfoque Lidcombe (niños de 2-6 años): Los padres son entrenados como co-terapeutas, alta eficacia (70-90% de los niños alcanzan fluidez natural). Cuanto más temprano, mejor pronóstico.
¿Los adultos que tartamudean pueden mejorar?
Sí, aunque la 'cura' completa es rara, se pueden lograr mejoras significativas y una mejor calidad de vida. Enfoques terapéuticos: 1) Técnicas de fluidez (fluency shaping): Habla prolongada, inicio suave, contacto ligero, respiración diafragmática. Objetivo: Reemplazar los patrones motores de la tartamudez por habla fluida. 2) Modificación de la tartamudez (stuttering modification - Van Riper): Cancelación, pull-out, preparación. Objetivo: Tartamudear con menos tensión y esfuerzo. 3) Terapia cognitivo-conductual: Reducir el miedo y la evitación, mejorar la autoestima, enfrentar situaciones temidas. 4) Dispositivos tecnológicos: Retroalimentación auditiva demorada (DAF), enmascaramiento de frecuencia (FAF). Eficacia variable. Pronóstico: Adultos altamente motivados, con buena adherencia, pueden alcanzar un 70-90% de fluidez en entornos controlados. Mantener la fluidez en situaciones estresantes es un desafío. Los grupos de apoyo (ej: NSA - National Stuttering Association) son valiosos.
¿La tartamudez tiene cura? ¿Ayudan los medicamentos?
No existe una 'cura' en el sentido de eliminación permanente y total de la tartamudez en la mayoría de los adultos. La terapia de fluidez puede conducir a períodos prolongados de fluidez, pero el mantenimiento requiere práctica continua. Medicamentos: No hay medicamentos aprobados específicamente para la tartamudez. Algunos estudios probaron: Haloperidol, risperidona (antagonistas dopaminérgicos): Mostraron reducción de disfluencias, pero los efectos secundarios graves (parkinsonismo, discinesia tardía) limitan su uso. No recomendados. Pagoclone (modulador GABAérgico): Estudios de fase 2 mostraron un beneficio modesto, pero el desarrollo fue descontinuado. Ecopipam (antagonista D1): Estudios en curso, resultados preliminares positivos. Uso no indicado en la etiqueta (off-label): Los ansiolíticos (alprazolam, clonazepam) pueden ayudar en situaciones específicas de alta ansiedad, pero existe riesgo de dependencia. No tratan la tartamudez en sí. El enfoque debe ser la terapia fonoaudiológica, no medicamentosa.
Referencias Científicas
- 1. Riley GD. Stuttering Severity Instrument for Children and Adults (SSI-4). 4th ed. Austin, TX: Pro-Ed; 2009.
- 2. Yairi E, Ambrose N. Epidemiology of stuttering: 21st century advances. J Fluency Disord. 2013;38(2):66-87.
- 3. Guitar B. Stuttering: An Integrated Approach to Its Nature and Treatment. 4th ed. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins; 2013.